Se aparece Marzo……Hace ya un par de meses que se anuncia que a la Presidente Bachelet y a su gobierno se les aparecerá “marzo” de manera poco grata. Las acciones de Gobierno, en lugar de tratar de calmar las situaciones ha rociado de gasolina algunos conflictos, por lo que no resultaría raro tener un mes bastante rojo.
ANDIME. Asociación Nacional de Funcionarios del Ministerio de Educación, ha manifestado su descontento con las leves sanciones aplicadas al ex SEREMI Traverso y amenazan con movilizaciones para impedir que este sujeto pueda volver a la Administración Publica.
Los funcionarios venían denunciando desde el año 2000 las irregularidades existentes en la SEREMI Metropolitana de Educación, sin que las autoridades investigaran estos temas y mucho menos aún les diera alguna respuesta formal a las inquietudes de los agremiados.
La asociación de funcionarios no descarta ninguna forma de presión, para que Traverso reciba al menos las sanciones solicitadas por la Contraloría General de la Republica, a la vez que advierten, que en su postura cuentan con el apoyo de la ANEF, Asociación Nacional de Empleados Fiscales.
El Colegio de Profesores, por su parte, habla de que la situación de la SEREMI era un secreto a voces, denuncia apropiaciones de recursos por parte de sostenedores y la existencia de un sistema educativo en crisis, de la que dicen, nadie puede hacerse el leso, pues llevan años denunciando las anomalías.
Subrepticiamente el colegio de maestros llama a cambiar el sistema educativo, en que los que han asumido la “labor cooperadora” solo se han preocupado de obtener jugosos beneficios económicos, por sobre el interés nacional de mejorar la educación nacional.
Por otro lado, las situaciones de mala calidad de la educación, problemas en transantiago, infraestructura insuficiente, incumplimiento de los acuerdos por parte del gobierno no hacen otra cosa que presagiar que los pingüinos, a los que sin duda se plegarán otros sectores, volverán a la protesta.
El sistema educacional nacional está colapsado, en forma muy especial por varias reformas educacionales mal realizadas, una deficiente focalización de los recursos, las demostraciones de una creciente falta de respeto por los actores del rubro y la permanente “sordera” de las autoridades a las demandas sociales.
La soberbia nunca ha sido una buena consejera, menos aún en situaciones de conflicto, lamentablemente la Presidente Michelle Bachelet, así como su antecesor en la presidencia, y la Ministro del ramo, al igual que sus predecesores, han pecado de una altanería ofensiva para los involucrados en este tema vital para el desarrollo.
La “Chepa”, Patricia Troncoso, activista Mapuche condenada a 10 años de presidio por atentados terroristas, incendio de propiedad agrícola en la Novena Región, anunció que vuelve a su huelga de hambre porque el ejecutivo no ha cumplido los compromisos con los que se puso término a la medida de presión anterior, con lo que la encarcelada consiguió, entre otras cosas ser trasladada a un presidio menos custodiado y salidas dominicales.
La renovación del ayuno por parte de la reo demuestra varias cosas, en primer lugar que la autoridad nacional SOLO actúa y soluciona las problemáticas cuando estas están a punto de un estallido feroz, que se solucionan los problemas solo a aquellos que tienen capacidad de presión, y a lo mejor lo que es más grave, echa por tierra el mito ese de que los beneficios intra-carcelarios los concede una comisión especializada sin la participación del Gobierno.
Por cierto, el Gobierno, a través del Ministro Francisco Vidal, dijo que la acción de la dirigente indígena había sido provocada por un “mal entendido” que será solucionado a la brevedad posible, recordando, de paso que el tema fue ampliamente tratado en el comité político del viernes. Vidal aseguró que estaba todo dispuesto para que la huelguista tuviera lo acordado a contar del primero de Marzo.
Creemos que el tema es importante de dilucidar, pues, a casi todos los prisioneros por actos de terrorismo, sean o no de sangre, se les hada dado beneficios contemplados en la legislación y que dependen de Gendarmería. Salidas dominicales, rebajas de condenas, condiciones especiales de prisión, etc. para los amigos del régimen, mientras a los uniformados procesados se les ha negado permanentemente el acceso a esos derechos.
La prisión se supone que es una sanción destinada a redimir a los delincuentes, sean estos comunes o con motivaciones políticas, pero, solo en mentalidades totalitarias se puede concebir este sistema como el ejecutor de la venganza de aquellos que han logrado hacerse de posiciones de poder, pues, en ese caso la rueda de la fortuna podría cambiar demasiado seguido, siendo solo los nuevos huéspedes del sistema los perjudicados.
¿Es respetable la consecuencia?
Se ha intentado, sobre todo después de la muerte de la dirigente del Partido Comunista Gladys Marín, mostrar la consecuencia como una virtud en sí misma, cuando es más bien una demostración de tenacidad en las ideas, aunque, como en el caso del personaje comentado hayan sido claramente erróneas.
A tres años de su fallecimiento, calles y plazas han sido bautizadas con el nombre de esta dirigente, y hasta con el nombre de Salvador Allende, inclusive por Alcaldes que dicen ser antimarxistas y de oposición a aquellos que disfrazados de demócratas han accedido al poder y vuelven a destrozar nuestra Patria.
De no ser así en la historia reciente del mundo encontramos seres de una tremenda consecuencia, como Adolfo Hitlet, José Stalin, Mao Tse Tung, George Bush, Erich Hönecker, entre otros, a los que nadie alaba por la consecuencia con que han tratado de destruir el mundo en que vivimos o sus esfuerzos por liquidar a sus enemigos.
La consecuencia, avalórica, no tiene sentido alguno, mas bien, estamos ciertos de que es en si misma un desliz sumamente peligroso, que no tiene nada de admirable, destacable ni mucho menos de respetable, pues tiene una cara muy parecida a la obsecuencia o sumisión a doctrinas extranjerizantes y, además, ateas.
Creemos que transigir con el error, la maldad o las aviesas intenciones de algunos, fuera de convertirnos en cómplices, nos transforma en avales de la perversidad, por lo que si existe algo parecido al infierno, nos estaríamos ganando un pasaje de primera y con estadía eterna a el.
No, definitivamente, al menos para nosotros, que sentimos la muerte de Gladys Marín, como sentimos la de todos los seres que fallecen, la defunción no la ha transformado ni en una buena persona, pues no olvidamos las odiosidades que destilaba, ni en un ser admirable, porque consideramos que envenenó el alma nacional.
Creemos que la exaltación de personajes como Allende, la propia Marín, el patas cortas Corvalán o el mayoneso Altamirano son una ofensa gratuita a la capacidad intelectual de los chilenos y, sin titubeo, pensamos que es una apuesta perdedora a la mala memoria tan tradicional en nuestro pueblo.
Estamos ciertos también que recordar a gente que tanto daño hizo a nuestra patria no hace más que mantener abiertas y supurantes las heridas, dejemos que su maldad sea olvidada en un ejercicio amnésico que con toda seguridad ayudará a sanar el alma doliente del pueblo.
